La comunicación, como una ciencia, hoy se nos hace posible observarla desde más de un único punto de vista, por lo menos es la manera en que lo plantea el profesor José Antonio Paoli Bolio cuando nos explica las teorías básicas de la ciencias de la comunicación.
Las ciencias de la comunicación nos plantean desde las distintas teorías que podremos notar colectivos de investigadores y teóricos provenientes de las ciencias sociales con sus propias y particulares formas de plantearnos a la comunicación. Las teorías de la comunicación estudian el modo en que los seres vivos -humanos- se producen y reproducen a sí mismos y a su medio sirviéndose de la información en común.
José Antonio Paoli Bolio. |
Ahora mismo habitamos un mundo hipercomunicado, la forma o la óptica en la que estudiamos los fenomenos comunicacionales no obedecen a una única manera de iniciar o conducir el análisis. Tenemos disponibles variedad de herramientas, escuelas y corrientes.
A estos grupos algunos también les denominan "escuelas de la comunicación" otros les llaman "modelos de la comunicación" y les podremos distinguir como la escuela funcionalista de la comunicación encabezada por el sociólogo de las universidades de Columbia, UCLA, y Annenberg School of Communication; Charles R. Wright. Para Wright coexisten cuatro funciones de los medios: la vigilancia para la supervivencia de la especie y del medio ambiente, que realiza a través de las noticias de actualidad; la vertebración e identidad social, la transmisión del legado cultural, funciones que ya había referido Lasswell, y añade la del entretenimiento. Analista de los efectos, la influencia, los usos y las gratificaciones, relacionó las clases sociales y la formación previa con los consumos de los medios y el valor de uso asignado a éstos. Porque los medios masivos se caracterizaban, a juicio de Wright, por la amplitud de la audiencia alcanzada y la distribución indiscriminada de sus contenidos, aunque no de forma desorganizada, sino normativa, sujeta a reglas, a valores de eficacia. Para Wright los modos de comunicación estandarizan los fenómenos sociales -Primer nivel- también nos ayuda a establecer las funciones y las disfunciones (conflictos) que pueden surgir en la sociedad a causa de cada uno de los medios -Segundo nivel- analiza a los medios de comunicación como una organización que repite patrones tomados de otros medios más antiguos y los adapta y muy poco y los adopta -Tercera función- de Charles R. Wright. Los medios de comunicación desde la óptica funcionalista deben satisfacer la necesidades de una sociedad -conjunto de instituciones- y qué tan eficaces son éstos haciendo su función social. Se adopta el pensamiento spenceriano sobre en donde todo estimulo que contribuye a asegurar la función social asignada al órgano es funcional, y todo estimulo que rompe el desempeño de esta función es disfuncional y, aquellos estímulos que no afectan a las funciones socialmente necesarias resultan afuncionales.
Las teorías funcionalistas nos advierten que la sociedad y sus instituciones tienden a buscar un equilibrio o balance y así evitar la irrupción violenta a través de recursos o instrumentos para su autorregulación.
Ferdinand de Saussure |
En otro colectivo de investigadores está la escuela estructuralista de la comunicación la que de alguna manera se basa en el modelo estructural. Esta escuela de la comunicación ha derivado sus modelos de la lingüística estructural, a partir de Ferdinand de Saussure -lingüista estructural suizo- y el libro "Curso de Lingüística General" mismo que fue redactado tras su muerte por dos de sus colegas, basándose en las anotaciones que sus estudiantes -Ch. Bally, A. Sechehaye, H. Frei, A. Meillet, J. Vendries- habían tomado en cursos de lingüística general dictados por éste en la Universidad de Ginebra entre 1906 y 1911. De ese curso se destacan las consideraciones de Saussure referentes a signo lingüístico humano, el cual analiza en un concepto o significado y su "imagen acústica" o significante. Por otra parte, los significados y significantes que constituyen signos configuran el lenguaje, el cual tiene dos ejes: el paradigmático o metafórico y el sintagmático o metonímico, uno es el eje del habla o sincrónico y otro se corresponde a la lengua o diacrónico; por esto para el primer estructuralista que fue Saussure la sincronía (el fenómeno del lenguaje en un momento dado, junto a otros paralelos) y la diacronía (el fenómeno del lenguaje a través del tiempo) son básicos. La relación de significación debe pensarse a partir de una teoría del valor, es decir, que la posibilidad de remitir a algo fuera del lenguaje dependerá del sistema total de la lengua y de la relación formal de los términos entre sí. Este modelo o escuela de comunicación estructuralista se basa en una formalización lógica, aquí sus modelos tratan de identificar lo que tienen en común con otros modelos obtenidos de realidades diferentes, estos los hace más abstractos en sus explicaciones. La fuente filosófica de este modelo es Kant, quien señaló que existen categorías universales -espacio y tiempo- que el conocimiento aplica en cualquier dato originado en la realidad y que sirven para crear representaciones del mundo, se agrega después a través de los psicólogos de la Gestalt la categoría "forma" estos se utilizan para organizar los estímulos que viajan a los sentidos. Entenderemos a la formalización como el empleo de lenguajes formales para expresar las relaciones existentes entre los datos. En la visión estructuralista de las ciencias de la comunicación se investiga los modelos generales de la organización que hay tanto en los fenómenos naturales como en los sociales.
Por semilogía vamos a entender a la ciencia que estudia los diferentes sistemas de signos -idiomas, códigos, o señalizaciones- que permiten la comunicación entre individuos, sus modos de producción, de funcionamiento y de recepción. Para F. Saussure "la lengua es un sistema de signos que expresan ideas, y por eso comparable a la escritura, al alfabeto de los sordomudos, a los ritos simbólicos, a las formas de cortesía, a las señales militares, etc. Solo que es el más importante de todos los sistemas." Por semiótica -pierciana- se entiende como el estudio de los sistemas de signos no lingüísticos o solamente como la ciencia de los signos. La Asociación Internacional de Semiótica (AIS) creada en 1969, asegura que no se trata de términos equivalentes o sinónimos.
Por semilogía vamos a entender a la ciencia que estudia los diferentes sistemas de signos -idiomas, códigos, o señalizaciones- que permiten la comunicación entre individuos, sus modos de producción, de funcionamiento y de recepción. Para F. Saussure "la lengua es un sistema de signos que expresan ideas, y por eso comparable a la escritura, al alfabeto de los sordomudos, a los ritos simbólicos, a las formas de cortesía, a las señales militares, etc. Solo que es el más importante de todos los sistemas." Por semiótica -pierciana- se entiende como el estudio de los sistemas de signos no lingüísticos o solamente como la ciencia de los signos. La Asociación Internacional de Semiótica (AIS) creada en 1969, asegura que no se trata de términos equivalentes o sinónimos.
Charles Sanders Pierce. |
La semiología llegó a ser una disciplina independiente a través del trabajo del inversigador norteamericano Charles Sanders Pierce, éste definió al signo como "Representamen, es un Primero que mantiene con su Segundo, llamado Objeto, tan verdadera relación triádica que es capaz de determinar un Tercero, llamado Interpretante, para que éste asuma la misma relación triádica con respecto al llamado Objeto que la existente entre Signo y Objeto." También nos explica que existe entre los iconos una subdivisión que bien podría entenderse así; imágenes, diagramas y metáforas.
Otro modelo o escuela conocido como modelo dialéctico o escuela marxista de la comunicación se basa en las relaciones de dominio o subordinación de una clase social a otra, y de los sistemas de producción -infraestructura tecnológica- y quienes los dirigen y como influyen éstos en los medios y sus productos comunicacionales.
Existen algunos links sobre otros destacados investigadores de las ciencias de la comunicación que te resultarán también muy útiles:
Roland Barthes
Umberto Eco
Noam Chomsky
Otro modelo o escuela conocido como modelo dialéctico o escuela marxista de la comunicación se basa en las relaciones de dominio o subordinación de una clase social a otra, y de los sistemas de producción -infraestructura tecnológica- y quienes los dirigen y como influyen éstos en los medios y sus productos comunicacionales.
Existen algunos links sobre otros destacados investigadores de las ciencias de la comunicación que te resultarán también muy útiles:
Roland Barthes
Umberto Eco
Noam Chomsky
Podemos distinguir que las teorías de la ciencia de la comunicación poseen varias vertientes, desde lingüistas a sociólogos que entre muchos otros nos brindan las bases que nos ayudan a su análisis y a su más clara comprensión.
La escuela francesa de comunicación, o teoría crítica francesa, se distingue por su enfoque en el análisis cultural y su crítica incisiva de los medios de comunicación, considerando estos últimos no solo como canales de información, sino como actores fundamentales en la construcción y perpetuación de la cultura y la ideología. Esta corriente se interesa por cómo los medios contribuyen a la formación de identidades sociales y a la reproducción de relaciones de poder, analizando las maneras en que los discursos mediáticos pueden reforzar o desafiar las estructuras sociales existentes. Pierre Bourdieu, a través de conceptos como el "habitus" y el "capital simbólico", ofrece herramientas para entender cómo las prácticas culturales y mediáticas están interrelacionadas con las dinámicas de poder en la sociedad. Por su parte, Jean Baudrillard introduce nociones provocativas como la simulación y el hiperrealismo, argumentando que en la era de los medios masivos, la representación se ha convertido en una realidad en sí misma, desdibujando las fronteras entre lo real y lo simulado.El análisis crítico que propone esta escuela ha tenido un impacto significativo en los estudios contemporáneos sobre comunicación, al enfatizar la necesidad de desentrañar las ideologías subyacentes en los contenidos mediáticos y su capacidad para moldear percepciones colectivas. Los teóricos franceses abogan por una comprensión más profunda de cómo los medios no solo reflejan, sino que también construyen realidades sociales, lo que implica un examen crítico de las narrativas dominantes y sus implicaciones éticas. Sin embargo, esta corriente también ha sido objeto de críticas por su enfoque a menudo abstracto y su tendencia a subestimar el papel activo de las audiencias en la interpretación y negociación del significado. A pesar de estos desafíos, el legado de la teoría crítica francesa sigue siendo fundamental para abordar cuestiones contemporáneas sobre el poder, la cultura y la comunicación en un mundo cada vez más mediado.
La escuela de Fráncfort, o teoría crítica, se caracteriza por su enfoque multidimensional que combina elementos del marxismo con la teoría social y cultural, ofreciendo un análisis profundo de cómo los medios de comunicación actúan como vehículos de manipulación y control social. Teóricos como Theodor Adorno y Max Horkheimer introdujeron el concepto de "industria cultural", que describe cómo la producción masiva de cultura se convierte en un mecanismo para perpetuar la conformidad y la alienación en las sociedades contemporáneas. Su obra seminal, Dialéctica de la Ilustración, argumenta que la cultura popular no solo refleja las condiciones sociales, sino que también contribuye a mantener el statu quo al distraer a las masas de las realidades críticas y las desigualdades inherentes al capitalismo. Este enfoque crítico se complementa con el trabajo de Jürgen Habermas, quien, aunque comparte preocupaciones sobre la manipulación mediática, introduce la noción del "espacio público" como un ámbito donde los ciudadanos pueden participar en el debate racional y crítico.A medida que la teoría crítica ha evolucionado, ha enfrentado nuevos desafíos en el contexto del capitalismo tardío y la globalización. Los teóricos contemporáneos han ampliado el análisis para incluir cómo las nuevas tecnologías de comunicación transforman las dinámicas de poder y resistencia. La crítica a la industria cultural se ha vuelto aún más pertinente en un entorno mediático saturado, donde las plataformas digitales no solo difunden contenido, sino que también configuran las formas en que se produce y consume información. Esta dualidad plantea preguntas sobre el papel activo de las audiencias en la interpretación de los mensajes mediáticos y su capacidad para resistir la conformidad impuesta por los discursos dominantes. En este sentido, la escuela de Fráncfort sigue siendo una referencia crucial para entender las complejidades del poder cultural y mediático en la sociedad actual, destacando la necesidad de una crítica constante a las estructuras que moldean nuestras experiencias comunicativas.
Los estudios culturales, que emergieron del Centro de Estudios Culturales Contemporáneos de Birmingham en la década de 1960, ofrecen un enfoque interdisciplinario que explora la intersección entre cultura, medios de comunicación y sociedad. Esta corriente se centra en cómo los medios no solo representan realidades sociales, sino que también participan activamente en la construcción de identidades y significados. Stuart Hall, una figura central en este ámbito, introdujo conceptos clave como la codificación y decodificación de los mensajes mediáticos, enfatizando que el significado no es inherente al texto, sino que se produce en la interacción entre el mensaje y el público. Hall argumentó que las audiencias no son receptores pasivos; en cambio, interpretan y negocian los significados de acuerdo con sus contextos socioculturales, lo que resalta la importancia de considerar las diferencias en las experiencias y las identidades al analizar la recepción mediática.A medida que los estudios culturales han evolucionado, han incorporado una variedad de enfoques teóricos y metodológicos para abordar cuestiones contemporáneas sobre poder, resistencia y representación. Los investigadores han ampliado el análisis para incluir temas como la globalización, el consumo cultural y las dinámicas de género y raza en los medios. Esta perspectiva crítica permite examinar cómo las representaciones mediáticas pueden perpetuar estereotipos y desigualdades, así como cómo los públicos pueden utilizar los medios como herramientas de resistencia y afirmación cultural. Además, la influencia de las nuevas tecnologías y plataformas digitales ha transformado radicalmente el paisaje mediático, desafiando las nociones tradicionales de autoría y consumo. En este contexto, los estudios culturales continúan siendo fundamentales para entender cómo se negocian las identidades en un mundo mediático cada vez más complejo e interconectado, ofreciendo un marco analítico robusto para explorar las dinámicas entre cultura, poder y comunicación.
Herbert Marshall McLuhan, considerado el "padre de los estudios de medios", puede situarse dentro de la tradición de la teoría crítica, aunque su enfoque es distintivo y a menudo se le asocia con una perspectiva más amplia que incluye elementos del funcionalismo y el estructuralismo. Su famoso aforismo "el medio es el mensaje" encapsula su creencia de que la forma en que se transmite un mensaje tiene un impacto más significativo en la percepción y el comportamiento humano que el contenido mismo del mensaje. McLuhan argumentaba que los medios son extensiones de las capacidades humanas, lo que implica que cada nuevo medio transforma no solo la comunicación, sino también la estructura social y cultural en la que se inserta. Esta idea resuena con las preocupaciones de la escuela de Fráncfort sobre cómo los medios pueden manipular y controlar a las masas, aunque McLuhan adoptó un enfoque más optimista al considerar los medios como agentes de cambio potencial. Además, McLuhan introdujo conceptos innovadores como la "aldea global", anticipando cómo las tecnologías de comunicación modernas podrían interconectar a las personas a nivel mundial, desdibujando las fronteras geográficas y culturales. Su análisis del impacto de los medios eléctricos en las dinámicas sociales es relevante para comprender los fenómenos contemporáneos relacionados con Internet y las redes sociales. Aunque su trabajo no encaja perfectamente en ninguna escuela específica de comunicación, su influencia es innegable y ha dejado una huella duradera en el estudio de cómo los medios moldean nuestras experiencias y percepciones del mundo. La capacidad de McLuhan para integrar diversas corrientes teóricas y su enfoque multidimensional lo convierten en una figura clave en el análisis crítico de la comunicación contemporánea.
En memoria de nuestro querido y admirado profesor Lic. Adolfo Malo Pérez. QEPD.
Qué estés bien,
El autor de este post es publicitario, creativo y productor audiovisual y ha incursionado exitosamente como docente universitario para el Instituto de Mercadotecnia y Publicidad de México, así como en la UNITEC en Honduras desde hace más de veinte años. Es asesor publicitario independiente, redactor de artículos sobre publicidad, conferencista y blogger.
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