¿Cómo sería nuestra sociedad pos moderna sin la publicidad?
De pronto recordaste que tienes pendiente comprar una camisa para la reunión de trabajo de mañana temprano, pero no estás en tu ciudad, estás en otro continente y las marcas de tu confianza aquí no están presentes. ¿Qué hacer ahora?
Te dolió la cabeza y vez que en tu botiquín y no tienes las pastillas de siempre para quitar el dolor de cabeza, sales a la calle a buscar en la farmacia de siempre y encuentras el punto de venta y tu medicina, pagas en la forma que siempre lo haces y en unos minutos, adios a ese dolor de cabeza. O llamas desde tu teléfono a una farmacia que hace entrega en la puerta de tu casa.
En ambos casos hemos visto la importancia de la publicidad en la vida diaria del consumidor. Si cada vez que hay buscar un producto para una atender o satisfacer una necesidad "X", debo salir a caminar por allí y dar mil vueltas para ver que encuentro en mi camino o cerca de dónde estoy para atender mi necesidad, sería un error atender algún proyecto un poco más complejo de esta manera, como comprar un carro nuevo, un televisor de plasma HDTV, una estufa, unos muebles de sala, etc. El conocimiento que nos ofrece la publicidad acerca de productos y servicios que están disponibles a nuestro alrededor es vital para satisfacer cada una de nuestras necesidades, ahora bien ¿qué pasa cuando un buen producto no se publicita? El público pierde valioso tiempo en buscar que alguien por allí me pueda recomendar un producto que pueda solucionar mi problema, o hasta puede pasar que nadie lo haga y a pesar de sí existir es como si no existiera, pues nadie lo conoce.
Cuando como sociedad empezamos a intercambiar productos excedentes a otros grupos y necesitamos comunicar nuestra oferta, allí mismo empezamos a utilizar la publicidad, es parte de nuestro sistema comercial y no podemos imaginar uno sin el otro.
La mejor manera de acercar la oferta y a la demanda es a través de la publicidad. La economía de los países depende de ese volumen de compras que hacen sus ciudadanos cada vez que salen a satisfacer su hambre, su sed, su frió, su calor, cualquier necesidad sin importar cual sea ésta.
Los escenarios más favorables son aquellos que cuentan con muchos buenos productos o servicios disponibles en los puntos de venta, al precio que estamos dispuestos a pagar por éste y aquí el consumidor tendrá que seleccionar aquel que crea más favorable para él mismo. Lograr que el consumidor tenga preferencia por alguno es trabajo de la publicidad y de todo un plan de mercadeo bien desarrollado.
Las sociedades con mayor actividad comercial y con mayor consumo, aquellas que tienen anunciantes más agresivos y propuestas publicitarias más creativas, suelen tener la relación más fuerte entre el Producto Interno Bruto (PIB) y la facturación o inversión publicitaria. Cada vez que una empresa o institución invierte en publicidad mejora la calidad de vida de sus consumidores y fortalece la actividad económica de su país y venderá más. La publicidad a final de cuentas no sólo potencia la ventas de productos, sino que viene a mejorar los estilos de vida de las personas, fortalece la economía de los países, nos ahorra tiempo al informarnos anticipadamente o bien oportunamente sobre productos y sus características.
Al final del ejercicio de publicitarse el anunciante aprende y descubre que puede construir una marca fuerte, que en muchos casos alcanza solo como marca mucho mayor valor que su fábrica, y todos sus equipos, y logra desarrollar valor a su marca al hacerla memorable y atractiva en la mente de millones de consumidores. Por eso vemos que las marcas lideres en el mundo aun en el peor escenario de crisis siguen publicitandose, y no le dejan espacios vacíos a sus competidores pues estar presentes en los medios le hace no ser olvidados ante tantos nuevos productos cada año.
No hay opciones, debemos arriesgar, para ganar.
Que estés bien.
Mauricio Pineda
El autor de este post es publicitario, creativo y productor audiovisual y ha incursionado exitosamente como docente universitario para el Instituto de Mercadotecnia y Publicidad de México, así como en la UNITEC en Honduras desde hace más de veinte años. Es asesor publicitario independiente, redactor de artículos sobre publicidad, conferencista y blogger.